04122016

Hay personas que son trampolín y,
a pesar de tener nombre y definición propios,
significan impulso:
te aúpan a ser y hacer mejor.

Hay personas que son trébol, que no suerte.
Porque si hablamos de suerte…
ésta debería desescribirse para significarte.
Que compartís vocales y no es casualidad.
(pero tú llevas acento)
Porque cuando tú, dejé de creer en ella,
para creer en nosotros.
Porque cuando tú: YO.
Yo, más de todo lo que ya era.

Eres interruptor para todo lo que merece la pena
y el impulso que asegura que la valdrá.
Existir a tu lado es morirse por conjugar
con todas las ganas posibles, el verbo vivir,
hasta que no nos quede más remedio
que tener que reinventarlo (para mejorarlo).

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